Al menos el 20% de este límite máximo se puede utilizar para mejorar el impacto ambiental del cultivo del olivo; el 30% para mejorar la calidad de la producción; y el 15% para el sistema de trazabilidad, certificación y protección de la calidad del aceite de oliva y las aceitunas de mesa, en particular el control de los aceites vendidos a los consumidores finales.
“Con la firma del Decreto estamos sentando las bases para el inicio del nuevo programa de apoyo al sector oleícola para los próximos dos años que nos conducirá a la nueva PAC. Un uso inteligente de los recursos por parte de las organizaciones de productores y sus asociaciones nacionales permitirá al sector innovar de manera adecuada para los nuevos, más allá del difícil período de los cierres en el canal Horeca por el COVID-19 que inevitablemente tuvo repercusiones negativas en las ventas", subrayó el subsecretario para las Políticas Agrarias, Giuseppe L 'Abbate.
Por intervenciones de mejora del impacto ambiental del olivar este Decreto se refiere a las operaciones de mantenimiento de olivares con alto valor ambiental y paisajístico y en riesgo de abandono, ubicados mayoritariamente en zonas con una difícil situación orográfica; el desarrollo de buenas prácticas agrícolas para el olivar en base a criterios ambientales adaptados a las condiciones locales así como su difusión y seguimiento; la demostración práctica de técnicas alternativas al uso de productos químicos para la lucha contra la mosca del olivo y técnicas de cultivo del olivo destinadas a proteger el medio ambiente y mantener el paisaje como cultivo ecológico; la protección de suelos limitando la erosión; e iniciativas para la protección de variedades en riesgo de extinción.
Las acciones para mejorar la competitividad del olivar a través de la modernización estarán dirigidas a la innovación de los sistemas de riego y técnicas de cultivo con la introducción de sistemas digitalizados; la sustitución de olivos improductivos por nuevos; y la formación de los productores en nuevas técnicas de cultivo.
Sobre la calidad de la producción, las intervenciones tendrán como objetivo la mejora de las condiciones de cultivo, la recolección y almacenamiento de las aceitunas antes de la elaboración y asistencia técnica relacionada; la mejora varietal de los olivares y de los residuos de producción; la asistencia técnica a la industria transformadora oleícola; el establecimiento y mejora de laboratorios para el análisis de las características organolépticas y fisico-químicas de los AOVEs, así como la formación de paneles de catadores para análisis sensorial.
Finalmente, se financiarán acciones para el diseño e implementación de sistemas certificados de trazabilidad de la cadena de suministro; la creación y aplicación práctica de sistemas voluntarios de certificación de la calidad basados en un sistema de análisis de riesgos y puntos críticos de control; así como el diseño, implementación y gestión de sistemas de control por el cumplimiento de los estándares de autenticidad, calidad y comercialización del aceite de oliva y aceitunas de mesa comercializados.
