En su ponencia, Martínez-aportó nuevos datos científicos, únicos en el mundo, sobre la protección por el patrón mediterráneo de alimentación frente a la infección por coronavirus. En el estudio SUN (Seguimiento Universidad de Navarra, con más de 9.000 participantes que han sido valorados desde 1999 con medidas repetidas de su dieta y otros factores), se ha demostrado que cuanto mejor se siga la Dieta Mediterránea, menor es el riesgo de infectarse de COVID.
Además, el investigador presentó otro estudio reciente, publicado en el European Heart Journal, del que Martínez-González es coautor, y mostró por primera vez que las personas que siguen la Dieta Mediterránea presentan en su sangre una serie de moléculas características que ayudan a predecir de modo objetivo el riesgo de infarto de miocardio e ictus.
También destacó que este patrón de alimentación se ha erigido como una estrategia global para luchar contra la obesidad, más que cualquier posible "píldora mágica" y ha mostrado su preocupación por este problema de salud pública sin precedentes. La población mundial ha pasado de tener 100 millones de obesos en 1975 a tener ahora 700 millones. “La obesidad hace que la infección por coronavirus sea más frecuente y más grave. La actual pandemia de coronavirus probablemente no existirá dentro de un año, pero seguiremos padeciendo esta gigantesca pandemia de obesidad, con un exceso de peso que causa más de 4 millones de muertes al año.”, explicó Martínez-Gonzalez.
El catedrático de Salud Pública de la Universidad de Navarra recordó que en Estados Unidos una de cada cuatro personas sufre ya obesidad severa y en 2030 se prevé que en algunos de sus estados el 60% de la población sea obesa. En España, los problemas de sobrepeso y obesidad también se han visto agravados por las consecuencias del confinamiento, como el sedentarismo o los malos hábitos alimentarios y “este exceso de peso afecta ya a un 70% de la población”, añadió.
Miguel Ángel Martínez-González lleva más de 30 años investigando la relación entre nutrición y salud, puso en marcha el macro-estudio a largo plazo SUN (Seguimiento Universidad de Navarra), con 23.000 participantes, y ha liderado la red que hizo el mayor ensayo de intervención realizado hasta ahora sobre los beneficios de la Dieta Mediterránea, el Predimed. Es epidemiólogo y catedrático de Salud Pública de la Universidad de Navarra, y también catedrático visitante en Harvard, desde donde tanto él como un buen número de sus colaboradores y discípulos han realizado diversas investigaciones y han contribuido a importantes asesoramientos en diversos programas para la mejora de las políticas de salud pública y alimentación.