El presidente de la institución provincial, José Manuel Caballero, ha subrayado la importancia del olivar en materia de sostenibilidad y también su potencial en relación con el turismo, así como su importancia en términos económicos en la provincia, primera productora de Castilla-La Mancha.
“Ciudad Real es vino pero también es olivo, un árbol íntimamente ligado a nuestra historia y nuestras raíces, y en muchas ocasiones es poco reconocida la importancia que tiene en términos económicos", ha asegurado.
La presidenta de la AEMO, Ana María Romero, ha destacado que el olivo no es simplemente un árbol, sino una cultura, la mediterránea, basada en cuatro pilares fundamentales: salud, medio ambiente, cultura y gastronomía.
Romero señaló que con el fin de divulgar y mostrar a los consumidores el tesoro de nuestra dieta desde AEMO han organizado un curso de cata on line, que contará con los mejores catadores de España en las distintas regiones para mostrar los matices de sus comarcas, y explicar los mejores usos culinarios de los aceites.
“¿A qué sabe Castilla la Mancha?” es el título de la próxima cata, que se celebrará el 22 de abril, con aceites de Ciudad Real y Toledo en torno a una sesión en la que se degustarán las variedades cornicabra, picual, frantoio y arbequina.
Cabe recordar que AEMO está conformada por más de 120 municipios y diputaciones españolas ligadas al cultivo milenario del olivo. Todos los socios que la integran son territorios en los que la producción de aceite de oliva y aceituna de mesa es una actividad fundamental de la economía local y donde la cultura del olivo ha supuesto, desde tiempos ancestrales, un eje para la socioeconomía de los municipios.
