www.mercacei.com
La evolución del sector del aceite de oliva en Portugal

La evolución del sector del aceite de oliva en Portugal

lunes 06 de septiembre de 2021, 12:22h

En Portugal, el sector del aceite de oliva se ha desarrollado de forma notable. En la actualidad, se trata del noveno país del mundo con mayor superficie de olivar -unas 360.000 hectáreas- y el séptimo productor mundial de aceite de oliva -unas 120.000 toneladas-. Sin embargo, en los últimos 10 años, el país duplicó su producción sin aumentar la superficie, como resultado de una modernización ejemplar del sector. Se espera que este crecimiento sea aún más significativo en el futuro.

En los últimos años, Portugal ha realizado grandes inversiones para modernizar el sector, invirtiendo en sistemas de producción más intensivos, instalaciones industriales modernas y métodos de producción sostenibles. Al mismo tiempo, se ha podido combinar una producción más masiva con una dedicada a nichos y con características más distintivas en el mercado, pero siempre centrándose en la obtención de aceites de oliva de calidad, que mantengan el reconocido prestigio de los aceites de oliva portugueses en el mercado mundial.

Efectivamente, como resultado de la modernización del sector, el país puede sentirse orgulloso de la excelente calidad de su aceite de oliva, ya que más del 95% de los aceites de oliva producidos son virgen y virgen extra.

En los olivares más modernos, y en la mayoría de los casos, hemos visto la integración vertical de toda o parte de la cadena de valor, con el establecimiento de explotaciones de alguna dimensión y la instalación de olivares eficientes, con un alto uso de la tecnología y conocimiento, y donde la almazara se instala en la propia explotación para producir aceite de oliva in situ, potenciando la creación de valor e incorporándolo al productor. En las regiones en que predominan modelos de producción más extensivos, se ha observado una dinamización de modelos de organización de la producción que ha permitido, de forma agrupada, la valorización de la producción y la capacidad de diferenciar los aceites de oliva en el mercado nacional e internacional.

Analizando el trabajo realizado en los últimos años, el sector debe estar realmente orgulloso del camino recorrido. El país supo profesionalizarse, dejándose asesorar por los mejores profesionales que apoyaron una producción adaptada a las condiciones edafoclimáticas en beneficio de la calidad, es decir, en cuanto a las variedades, las densidades de plantación, los sistemas de riego eficientes, las prácticas agronómicas, la promoción de prácticas ambientalmente sostenibles y la inversión en la modernización con el uso de la mejor tecnología disponible.

Siempre hay grupos de interés que critican el rápido cambio del paisaje, cuestionan algunos modelos de producción o la excesiva concentración de los olivares en una u otra región. Seguramente habrá cosas que se puedan mejorar, pero no haya duda de que Portugal es ya una referencia mundial en la producción sostenible de aceite de oliva.

Los efectos de esta inversión estratégica benefician a todo el país, directa e indirectamente, y han contribuido a aumentar las exportaciones, a crear riqueza y mantener a la población en el mundo rural, así como a promover una agricultura más sostenible, en línea con los grandes objetivos de la política europea.

Con el crecimiento previsto, todo apunta a que Portugal se convertirá, en la próxima década, en el séptimo productor mundial de aceite de oliva en superficie y el tercero en volumen.

Si está pensando en invertir en el sector del aceite de oliva, piense en Portugal. ¡Se sorprenderá!