Desde nuestros inicios, en Sovena hemos perseguido de forma continua e integrada adoptar las mejores prácticas y principios de sostenibilidad a lo largo de toda la cadena de valor, apoyándonos en la investigación, el desarrollo y la innovación.
A principios de 2020 la compañía redefinió su posicionamiento para, sin perder sus valores tradicionales, traducir de forma más coherente la identidad y el propósito de Sovena: ser un referente mundial en la industria agrícola y alimentaria, una marca atenta a la evolución de las tendencias alimentarias y una empresa comprometida con la conexión sostenible entre la tierra y la mesa.
Aprovechamos este momento para revisar y reforzar la Estrategia de Sostenibilidad. Así, diseñamos una estrategia con metas concretas y ambiciosas que apuntan a garantizar la sostenibilidad del negocio en el medio y largo plazo en todas sus dimensiones -económica, social y ambiental-, impactando positivamente en los ecosistemas y comunidades con los que interactuamos y alineándonos con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
La estrategia de Sovena se basa en la calidad, la seguridad alimentaria y la innovación, que constituyen nuestras bases principales y sobre las que siempre hemos sido extremadamente rigurosos y exigentes.
En nuestros olivares, certificados en Producción Integrada, utilizamos el conocimiento, la tecnología y la innovación para gestionar de forma eficiente todos los recursos, con especial atención al agua, el suelo y la biodiversidad.
Queremos trabajar de una manera cada vez más sostenible, pero también queremos aplicarlo en toda nuestra cadena de suministro. Para nosotros es fundamental que nuestros proveedores asuman una verdadera política y acción por la sostenibilidad, porque somos conscientes de que juntos incrementamos el impacto de nuestras acciones, visiones y compromisos.
En nuestros procesos fabriles, durante la transformación de aceites vegetales y en el envasado, buscamos continuamente la máxima eficiencia y optimización de nuestros recursos, con beneficios ambientales y económicos directos, dos realidades intrínsecamente ligadas.
Tenemos el ambicioso objetivo de reducir en un 30% nuestras emisiones de carbono de alcance 1 y 2 hasta finales de 2023. Invertimos fuertemente en energía procedente de fuentes renovables, en el uso de biomasa, en certificados de electricidad verde y en la instalación de paneles fotovoltaicos. Ya disponemos de instalaciones fotovoltaicas en tres emplazamientos de Sovena, dos en España y uno en Portugal, con unos 5.500 paneles instalados, una potencia de 2.500 kWp y una producción estimada superior al 15% de las necesidades de estas operaciones, lo que nos permite evitar la emisión anual de 1.200 toneladas de CO2 a la atmósfera.
A lo largo de los años hemos reducido drásticamente los residuos que generamos, fomentando su circularidad y promoviendo su valorización. Actualmente, alrededor del 94% de los residuos que producimos se valorizan posteriormente.
Otro de los temas que trabajamos -internamente y en alianzas- es la investigación y el desarrollo de envases más sostenibles, sin comprometer su calidad y funcionalidad. Trabajamos bajo los principios del ecodiseño, incorporando material reciclado, reduciendo el uso de materiales y aumentando su compatibilidad con los flujos de reciclaje existentes.
Por último, cabe señalar que la sostenibilidad no es únicamente ambiental, sino que prestamos la misma atención a la parte social. En este sentido, nos preocupamos a diario por las personas que trabajan con nosotros, por las comunidades locales y, por supuesto, por nuestros consumidores. Únicamente satisfaciendo sus necesidades, en un esfuerzo genuino por mejorar su bienestar, así como la resiliencia de los ecosistemas en los que viven y del planeta en general, conseguiremos que nuestros productos marquen la diferencia.
