Este año se han comercializado 13 marcas frente a las diez de 2024 de doce municipios. Se trata de Aljamo (Arganda del Rey), Thermeda Oleum (Tielmes), Frutos Verdes de Posito y Valleherboso (Villarejo de Salvanés), Molino de Titulcia (Titulcia), Ó de Oleum Laguna de Blas y Alma de Laguna (Villaconejos), Los Verdinales (Carabaña), Apis Aurelia (Colmenar de Oreja), La Lebrera (Valdilecha), La Peraleña (Perales de Tajuña), Oleomolino (Campo Real) y Complutum (Villalvilla y Valverde de Alcalá).
También las almazaras pasan de 10 a 13 inscritas bajo este sello de calidad. De ellas, tres fabrican únicamente de manera ecológica, con un total de 4.176 litros de los 34.000 extraídos este año. Y las empresas comercializadoras se duplican, pasando a dos en la región.
Según ha informado la Comunidad de Madrid, la venta de 2024 fue de 18.600 botellas y se espera un notable crecimiento en 2025. Las de esta campaña, aún a la venta, se pueden adquirir en las tiendas de los propios productores, on line, espacios gourmet y restaurantes.
Además, el Ejecutivo autonómico promociona estos aceites madrileños en ferias y mercados como La Despensa de Madrid, que entre los meses de mayo y octubre recorrerá 19 municipios, además de aportar 135.000 euros cada año a la labor del Consejo Regulador de esta DOP.
La Comisión Europea otorgó en 2023 el reconocimiento a la Denominación de Origen Protegida Aceite de Madrid. En la actualidad, la entidad cuenta con más de 20.000 hectáreas de olivos certificados, repartidas por casi un centenar de municipios, principalmente en las comarcas de La Campiña, Las Vegas y Suroccidental.
A su vez, el Gobierno regional ha recibido el Premio a la Excelencia 2025 de la World Olive Oil Exhibition (WOOE), que ha reconocido la singularización estratégica del territorio para la DOP y sus diferentes AOVEs, que se caracterizan por su sabor único e intensidad aromática. Sus propiedades proceden fundamentalmente de la mezcla de variedades cornicabra, castellana y manzanilla cacereña y, en una menor proporción, de carrasqueña, gordal, asperilla o redondilla.
Innovación, calidad y sostenimiento del olivar tradicional
El apoyo de la Comunidad de Madrid a este sector se refleja, según ha detallado, en ayudas que abarcan desde la mejora de la manufactura y la calidad, innovación en el proceso, comercialización y apertura de mercados o el sostenimiento del olivar tradicional.
Por otra parte, el Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario (IMIDRA) está desarrollando varias investigaciones en este ámbito. Están centradas en el manejo de suelos, el estudio de variedades de riego y secano de distinta procedencia, y la innovación en técnicas de cultivo y poda. Al mismo tiempo, el Centro de Olivicultura realiza estudios de elaiotecnia (elaboración, extracción y conservación de aceites), analizando su composición química y sensorial para posicionarlos mejor en el mercado.