Horacio González-Alemán cuenta con una experiencia de mas de 25 años en el sector agroalimentario, en el que ha trabajado para varias organizaciones a nivel nacional (FIAB), europeo (FoodDrinkEurope) e internacional (OCDE). En la actualidad es director de Thoffood, una asesoría de estrategia para la cadena agroalimentaria especializada en el entorno europeo, especialmente en el área regulatoria.
Para González Alemán, también profesor del Instituto Internacional San Telmo, lo cierto es que ahora si que “el consumidor es el rey”, y la tecnología y la información que tiene a su alcance, unido a la fuerte competencia por el cliente por parte de la distribución, “hacen que el acto de compra sea una conquista diaria”. A su juicio, las corrientes sociales influyen directamente en su elección y cada día pide más: sostenibilidad, ética, transparencia, responsabilidad social...”y si no es así, no compra”.
“La parte de percepción que rodea al producto es y será cada vez más importante, y en este ámbito, el aceite de oliva está excelente posicionado. Lo tiene todo para triunfar”, destaca el experto.
Retos
González Alemán considera que el sector oleícola ha sido ejemplo de crecimiento en los últimos decenios, siendo una de las estrellas de nuestro sistema agroalimentario, “la cadena de valor económica más importante del país”. “Las cifras están ahí y los atributos en términos de imagen, salud, cultura y territorio son a mi juicio sus grandes palancas”, remarca, si bien apunta que siempre se puede hacer más.
En este sentido, apuesta por seguir ampliando las exportaciones, abriendo mercados en las áreas que crecen (sudeste asiático especialmente ); y hacer un seguimiento estrecho de sus competidores fuera de la Unión Europea (UE), “porque algún día serán objeto de preocupación”. Asimismo, aboga por acompasar “nuestro peso político en las instituciones relevantes para el sector al peso económico que tenemos globalmente, y ese es un esfuerzo público-privado que no podemos pasar por alto”; así como reforzar la calidad y la seguridad, “ya que son requisitos no negociables que deben estar siempre entre las prioridades”.
González Alemán cree que “vivimos en un entorno complejo”, pero sobre todo caracterizado por la inmediatez y la aceleración de los acontecimientos, por lo que el sector debe estar atento a todos los cambios que se están produciendo en el entorno y que afectan directamente al negocio y a la cuenta de resultados.
Oportunidades y dudas
A nivel general, y aunque la economía global presenta elementos positivos, señala que lo que en la actualidad preocupa es la política como factor de riesgo. “Un buen ejemplo de ello es la guerra comercial que Trump ha abierto en varios frentes y que ya se está dejando sentir el crecimiento mundial”, añade, al tiempo que también observa oportunidades.
Al respecto, González Alemán afirma que el mundo crece en población y en especial en los países emergentes, donde la clase media supone más de la mitad del consumo mundial...y “estos datos nos están indicando donde están nuestros consumidores en los próximos años”.
No obstante, cree que también existen grandes dudas como el Brexit, “una decisión irreflexiva que nos puede llevar a costes económicos y políticos, especialmente para Reino Unido pero también para nosotros”. “Las empresas se desarrollan en este entorno y no deben perderlo de vista, sino más bien incluirlo en sus estrategias porque cada día afecta más al negocio”, concluye.
