Gracias al lenguaje braille y a las tecnologías modernas, este organismo italiano ha creado una etiqueta narrativa para permitir que las personas con discapacidad visual tengan acceso libre y fácil uso de la información sobre la composición y las propiedades saludables del aceite de oliva.
En este sentido, ha destacado que el aceite de oliva está compuesto de varias moléculas, principalmente de ácido oleico, un ácido graso monoinsaturado que actúa reduciendo el colesterol; vitamina E; escualeno, con actividad antisudoral; y fenoles que le confieren propiedades antioxidantes. En general, según ha subrayado, mejora el bienestar del propio organismo, ya que contribuye a la reducción de los trastornos relacionados con las enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas.
Por lo tanto, CREA ha considerado que el etiquetado es una herramienta fundamental para un consumo responsable, al proporcionar una información indispensable que en el caso del aceite de oliva virgen extra y el aceite de oliva virgen incluye, además, la denominación de venta y el origen.
De esta manera, "es posible rastrear el producto a lo largo de toda la cadena de suministro, demostrando su autenticidad y origen y oponiéndose a la falsificación. El aceite italiano es un patrimonio único en el mundo por su calidad y biodiversidad, que debe ser accesible para todos”, ha remarcado el organismo, al tiempo que ha señalado que se trata de un proyecto de inclusión social, igualdad de oportunidades y educación alimentaria.
"Un organismo de investigación no podía dejar de sentir la necesidad de los consumidores y ciudadanos y por ello inició esta importante iniciativa social. Leer etiquetas es un derecho y un deber de los consumidores y todos deben estar en las condiciones adecuadas para hacerlo", ha destacado Gabriella Lo Feudo, responsable de esta iniciativa en el CREA.
Desde hace años, son varias las empresas españolas que han presentado el etiquetado en braille de sus AOVEs con el fin de hacer accesible el producto a todos los consumidores.
