Los diez socios participantes en este proyecto piloto son las DOPs Queso de Murcia y Queso de Murcia al Vino, Guijuelo, Melocotón de Calanda, Queso Tetilla, Queso Manchego, Arzúa-Ulloa, Mejillón de Galicia y Sierra Mágina, así como las IGPs Plátano de Canarias y Morcilla de Burgos.
La DOP Sierra Mágina es la única figura de calidad diferenciada del aceite, que participa en este programa que permitirá un mayor control de la utilización de la certificación de calidad de Sierra Mágina, al apoyarse en las inspecciones de otros consejos reguladores, lo cual supondrá una mayor garantía de los consumidores, según ha precisado este sello de calidad.
Las irregularidades detectadas se comunicarán a la asociación y al consejo regulador u órgano de gestión afectado, para que continúe con los trámites correspondientes.
La entidad oleícola ostenta actualmente una de las vicepresidencias de ORIGEN ESPAÑA, asociación con la que lleva colaborando varios años.

El presidente de ORIGEN ESPAÑA, Ángel Pacheco, ha señalado “que este proyecto es un hito muy importante para la asociación y se trata de un paso más que damos para evitar fraudes o confusiones comerciales respecto a los productos de calidad diferenciada en distintos puntos de compra. Esta cooperación nos hará ser más eficientes en los controles y, sin duda, dará mayores garantías a los consumidores”.
El proyecto piloto, que tendrá una duración de un año, ha comenzado este mes de abril. Al final de éste se analizarán los resultados obtenidos y se trasladará esa información a la asamblea de la asociación para valorar la realización del trabajo a gran escala.
Cabe recordar que ORIGEN ESPAÑA se puso en marcha en 2008 para fomentar el reconocimiento del papel esencial de las DOPs e IGPs agroalimentarias españolas. Los principales objetivos de la asociación son impulsar el reconocimiento del papel que estos productos tienen en el desarrollo sostenible y, en segundo lugar, promover una mejor y más eficaz protección de estos sellos de calidad.
Cuenta con 94 asociados y una representatividad de cerca del 90% del valor económico de las indicaciones geográficas agroalimentarias españolas, lo que supone más de 1.600 millones de euros en valor de mercado.