Este organismo destaca que España es el primer exportador mundial de aceite de oliva, producto que ocupa el cuarto lugar de las exportaciones españolas de productos agroalimentarios. Uno de los mercados prioritarios es EEUU, cuya normativa es competencia del Gobierno Federal, de las autoridades estatales o incluso de las locales, de manera que un producto o servicio comercializado en el país norteamericano puede verse afectado simultáneamente por normas de estos tres niveles administrativos.
A su juicio, es relevante conocer de antemano el destino final de las exportaciones, con el fin de poder tener en cuenta todos los posibles requisitos que deben cumplirse. Además, en el caso del aceite de oliva, y en lo que respecta a normativa federal, son varias las agencias que intervienen en su regulación.
Asimismo, pueden existir normas establecidas por el sector privado que, aunque de carácter voluntario, son de cumplimiento recomendando en la medida en que las empresas industriales, los comerciantes, las compañías de seguros y los consumidores exigen que los productos se ajusten a ellos como garantía de calidad y seguridad.
En concreto, este documento detalla los aspectos aduaneros y fiscales (trámites aduaneros, derechos arancelarios y clasificación arancelaria, y tasas de trámites aduaneros); la legislación federal del aceite de oliva; y los requisitos de la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés), entre ellos sanitarios y de envoltorios y envases en contacto con alimentos, la Ley de Bioterrorismo, la Ley FSMA, el contenido de residuos de pesticidas, los contaminantes naturales inevitables, metales pesados y toxinas, los aditivos directos o indirectos, etiquetado del aceite de oliva (obligatorio y voluntario).
También recoge las normas y requisitos del Departamento de Agricultura de EEUU (USDA, por sus siglas en inglés) como los estándares de calidad del aceite de oliva convencional y ecológico y los requisitos fitosanitarios para palés de embalaje de madera entera.
Finalmente, incluye los requisitos para el envío de muestras, marcas y patentes, asesoría profesional para aspectos sanitarios, responsabilidad sobre el producto y código de barras.
