Planas también destacó que se trabaja, a nivel comunitario, para resolver las dificultades para el suministro de productos como el maíz o el aceite de girasol, que se han visto muy afectado por nuestra dependencia del mercado ucraniano. En concreto, se ha solicitado a la Comisión Europea la puesta en marcha de medidas como la activación de mecanismos para facilitar la disponibilidad de materias primas en el mercado único o la flexibilización de medidas de la Política Agraria Común (PAC) que permitan disponer de mayor superficie para la siembra.
A su juicio, esta situación ha puesto en evidencia la necesidad de trabajar de manera conjunta para lograr una autonomía estratégica europea, desde el punto de vista diplomático y político, pero también desde el punto de vista alimentario “y España contribuye decisivamente a esa autonomía alimentaria”. Por ello, insistió en que nuestro país está con Francia y otros Estados Miembros impulsando una serie de iniciativas para determinar el carácter estratégico de las producciones agrarias y ofrecer una solución a corto plazo.
Respecto al aceite de girasol, el Ministro aseguró hoy en el Congreso de los Diputados que se van a buscar otros mercados suministradores, si bien en España “tenemos la suerte de ser el primer productor mundial de aceite de oliva, más un 45 % del total, por lo que no tenemos un problema de grasas vegetales”. En cuando a los fertilizantes, cuya producción está muy vinculada al gas, Planas recordó que el 50% de estos productos que se consumen en España son de producción nacional.
Olivar tradicional
Por otra parte, el Ministro consideró que la propuesta de Plan Estratégico de la nueva PAC, que se envió a Bruselas a finales de diciembre, contempla muchos aspectos positivos para Andalucía y para el olivar de Jaén.
En concreto, Planas se refirió a la incorporación de un modelo de 20 regiones de ayuda básica que permite reflejar la diversa producción agraria del conjunto de España. Asimismo, explicó que el Plan Estratégico lleva aparejado un programa sectorial para el olivar tradicional por primera vez, con 30 millones de euros anuales, y además aseguró que los eco-esquemas otorgan mayor importe de ayuda a los cultivos leñosos con mayor pendiente.
También mencionó como aspecto positivo la inclusión de los pequeños agricultores a tiempo parcial en las ayudas de la PAC y el diseño del pago redistributivo para que no salgan importes fuera de la región de pago y que beneficia especialmente a las explotaciones medianas.
