Con el objetivo de decidir hacia dónde ir, Unifol decidió convocar a marcas como Coop, Conad, Vègè, Maiora, Megamark y Apulia, para debatir sobre las tendencias en el mercado del aceite de oliva, dada la importancia que las empresas asociadas a esta entidad destinan a la inversión en el olivar moderno y en el control de la calidad sensorial de su aceite de oliva virgen extra en los lineales, para lo cual ha designado un organismo de certificación externo.
La mesa redonda estuvo precedida por las intervenciones del Instituto Piepoli, Nielsen y Areté, quienes presentaron los resultados de algunos análisis de mercado recientes. Según explicó Unifol, estas entidades retrataron “un cuadro complejo”, con un consumidor desorientado, que reduce en parte el consumo –de manera contenida respecto a los aumentos de precios- y favorece en parte al producto italiano, también por la diferencia de precio respecto al comunitario.
La fotografía expuesta es la de un mercado que ha crecido en el último periodo, de manera interanual, un 27% en valor, mientras que en volumen se contrae un 9,7%, debido a dos años consecutivos de sequía que han diezmado la producción. “El futuro se presenta incierto, pero al mismo tiempo estimulante y se presagian cambios”, según las marcas presentes en la mesa redonda representando a Unifol.
A su juicio, “existen demasiadas variables para realizar previsiones: desde la llegada de las nuevas generaciones, cada vez más hábiles y rápidas para adquirir información, estudiar y comparar productos y ser más receptivos a las innovaciones”.
De las exposición realizada por los institutos se desprende, según Unifol, que el consumidor no ha abandonado el aceite de oliva virgen extra cuando el precio se ha duplicado, sino que ha preferido reducir el consumo y diferenciar su uso. "Las propias cadenas han subrayado que tienen muy claro que el consumidor ya no es el mismo que en el pasado se refugiaba en el aceite de oliva cuando el precio del AOVE aumentó excesivamente. El consumidor es más consciente del valor del aceite de oliva virgen extra, pero no lo suficiente como para orientarse y reasignar su consumo en el mare magnum de la categoría", detalló.
“Hoy, cuando hemos superado los límites de precios inimaginables y que el tsunami está bajo control, debemos realizar un cambio de marcha, donde el aceite de oliva virgen extra vuelva a ser más auténtico, legible y transparente”, subrayaron.
Finalmente, la distribución presente en Bitonto lanzó un mensaje al respecto, asegurando que “ese cambio es bienvenido, lo que significa más márgenes, más valor y menos promociones, pero no sin una iniciativa protagonista por parte de una cadena de suministro con una visión orgánica”.
