En esta actividad, que forma parte del programa impulsado con el apoyo del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM), participaron más de una treintena de cooperativistas.
En la presentación de la jornada, Marta A. Gómez Sánchez, asesora de Programa del IAM en Sevilla, resaltó los “valores de las mujeres del entorno rural”, tales como la unión o la fortaleza. Además, insistió en que deben abandonar los estereotipos y ser conscientes de que “los hombres no están ni delante ni detrás, sino al lado”.
La concejala de Educación, Formación e Igualdad del Ayuntamiento de La Puebla de Cazalla, Lucía Muñoz Cabello, señaló que “hay que dar visibilidad a las agricultoras y socias, pero no sólo en el campo, sino en puestos de responsabilidad, y para ello existen los Planes de Igualdad”. Por su parte, el presidente de Oleand-Manzanilla Olive, Antonio Candil Cabeza, afirmó que “es fundamental que las mujeres participen y estén en los órganos de dirección de las cooperativas porque tienen otro punto de vista y aportan nuevas perspectivas a la entidad”.
La jornada comenzó con una mesa redonda en la que se expusieron las experiencias en órganos de dirección de la mano de diversas socias de AMCAE-Andalucía. En ella expusieron su día a día de trabajo y cómo llegaron a ocupar sus respectivos cargos Carmen Bermúdez-Coronel García de Vinuesa, representante por Sevilla de AMCAE-Andalucía y consejera de Oleand Manzanilla Olive; María José Limones Orellana, consejera de Oleand Manzanilla-Olive; María Desamparados Perea Guisado, consejera de San Isidro Labrador de Marchena; y Carmen Navarro Silvan, presidenta de Virgen de Robledo (Constantina). Ésta última, con tan sólo 24 años, asumió la presidencia de su cooperativa y explicó que, pese a ser mujer y joven, no ha sufrido discriminación alguna y ha actuado en igualdad de condiciones, aunque sí reconoció que “existe una brecha de género que hay que superar”.
Todas ellas coincidieron en la necesidad de pertenecer a los órganos de dirección. En este sentido, Carmen Bermúdez-Coronel matizó que, antes de llegar al Consejo Rector, primero se deben ocupar cargos menores y participar en la Asamblea General para conocer bien el funcionamiento de la cooperativa.
Una de las herramientas más importantes con las que deben contar las mujeres cooperativistas es la capacidad de autoliderazgo y de ello habló Manuel Núñez Moreno, director de Marketing de Oleand-Manzanilla Olive. A través de una dinámica de grupo e interactuando con las participantes, destacó la importancia del autoliderazgo y de cómo la mayoría de las asistentes, en algún momento, lo han ejercido, pese a no reconocerlo como tal. Esta reflexión supuso un análisis introspectivo de todas las participantes que puso de manifiesto el potencial y la capacidad de las presentes para ocupar un puesto de responsabilidad. Además, ofreció una serie de parámetros al objeto de autoliderar para después liderar a los demás.
Para finalizar la sesión programó un taller para fomentar la gestión y creación de redes entre mujeres de cooperativas de Sevilla de la mano de Carmen Bermúdez-Coronel. Según explicó, el trabajo de la mujer rural es “duro e invisible y las redes suponen un elemento de aprendizaje, de ayuda mutua, entendimiento y sororidad”. En esta línea, puso en valor el trabajo realizado por AMCAE-Andalucía para establecer estas redes.
La parte más práctica de la jornada consistió en una cata de aceite dirigida por el maestro de almazara de Oleand-Manzanilla Olive, José Antonio Cabello Calderón, así como una cata de aceitunas a cargo del director de Fábrica de la entidad, José Luis Cabello Cáceres. Además, se realizó un recorrido por las instalaciones de la cooperativa en el que las asistentes pudieron conocer todo el proceso de elaboración, desde la recepción del producto hasta que sale transformada en aceite de oliva o en aceituna de mesa.
La clausura corrió a cargo de Lucía Muñoz, concejala de Igualdad del Ayuntamiento de La Puebla de Cazalla, quien agradeció la presencia de las asistentes y calificó la jornada como muy positiva.
Proyecto
AMCAE-Andalucía continúa con el “Programa para fomentar la capacidad de las mujeres socias, asumir funciones de liderazgo en los órganos de dirección de las cooperativas agroalimentarias de Andalucía e intercambiar buenas prácticas”. Este proyecto, que se está desarrollando por toda Andalucía, está financiado por el Instituto Andaluz de la Mujer (IAM), dentro de las subvenciones destinadas a asociaciones y federaciones de mujeres para la realización de proyectos que impulsen su participación social, la promoción de la igualdad de género y la prevención de la violencia contra las mujeres.
