Según Assitol, no será un otoño "caluroso" como el de 2022, pero tampoco será inolvidable desde el punto de vista de la producción. Así, prevé que la campaña de aceite de oliva 2023/24 se sitúe, una vez más, por debajo de la media en Italia y en el área del Mediterráneo. Las primeras estimaciones de Assitol, marcadas por la cautela y basadas en datos del Grupo de Diálogo Civil de la UE, subrayan el peso de las tensiones internacionales y las condiciones meteorológicas extremas.
“Aunque las cantidades parezcan aumentar, es imposible que la campaña que acaba de comenzar pueda reajustar completamente la situación. De hecho, algunos de los problemas de la última campaña no han desaparecido, basta pensar en el cambio climático, que en las últimas semanas ha hecho sentir sus efectos también en zonas con una importante vocación oleícola como la Toscana", ha explicado Andrea Carrassi, director general de la asociación.
Italia, según las primeras estimaciones de Assitol, producirá 289.000 toneladas de aceite de oliva, lo que supone una recuperación de un 20% respecto a las 240.000 t. de la temporada anterior, pero inferior a las 350.000 toneladas de las mejores campañas “y completamente insuficientes para las necesidades del mercado interno y de exportación, equivalente a 1 millón de toneladas”.
En particular, se espera una buena producción en el sur, especialmente en Puglia, Sicilia y Calabria. Sin embargo, la tendencia en el centro-norte del país será negativa, muy afectada por fenómenos meteorológicos extremos.
Según la asociación, el escenario italiano, marcado por el mal tiempo, es reflejo también del europeo. Así, ha precisado que España, primer productor mundial, sigue sufriendo la crisis hídrica provocada por la sequía y, por segundo año consecutivo, no superará las 765.000 toneladas, reduciendo así a la mitad sus cantidades habituales. El cambio climático ha provocado sequías e incendios en Grecia, que espera alcanzar las 260.000 toneladas (-25%), mientras que Portugal crecerá casi un 20% (150.000 toneladas).
Además, Assitol ha añadido que si Túnez parece volver a las 200.000 toneladas, mientras que Turquía y Marruecos han cerrado temporalmente sus canales de exportación debido al poco aceite de oliva disponible en la Unión Europea. A su vez, “el Mediterráneo está en el centro de la escena internacional debido al recrudecimiento del conflicto palestino-israelí y a las desavenencias entre los países árabes, lo que podría desencadenar una nueva ola de subidas de precios de la energía”, ha considerado.
“Este mosaico de cuestiones críticas influirá también en los precios del aceite de oliva, que han alcanzado repetidamente niveles récord en los últimos meses”, ha asegurado el director general de Assitol.
En su opinión, “lamentablemente, la nueva campaña se abre en una fase de descenso del consumo (-11% en los últimos meses), que corre el riesgo de empeorar si la situación económica empeora. La incertidumbre sigue siendo el aspecto más preocupante, especialmente para las empresas, que después de años difíciles tienen serias dificultades para diseñar un plan real para sus actividades”.
