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El principal motivo del consumidor japonés para utilizar aceite de oliva es su imagen de producto saludable

El principal motivo del consumidor japonés para utilizar aceite de oliva es su imagen de producto saludable

martes 02 de noviembre de 2021, 13:29h

En Japón, las mayores posibilidades de éxito del aceite de oliva a medio y largo plazo pasan por reforzar su imagen de producto saludable para estar en directa competencia con otros alimentos beneficiosos para la salud. Tanto por precios como por tradición culinaria, el aceite de oliva no se encuentra en condiciones de competir para aumentar significativamente su mercado en los segmentos más bajos de la demanda. No obstante, sí podría mejorar esta cuota aprovechando su valor añadido como producto saludable. En este sentido, el principal motivo del consumidor japonés para utilizar aceite de oliva es su imagen de producto saludable, según un estudio de ICEX España Exportación e Inversiones.

Las importaciones en Japón de aceite de oliva en los últimos años han ido creciendo a buen ritmo año tras año. En 2020, pese a no seguir esta tendencia, el comportamiento también debe considerarse muy positivo, según ICEX, ya que en un entorno de desplome del consumo en el canal Horeca debido al COVID-19 las exportaciones de aceite de oliva han conseguido mantenerse relativamente estables, situándose en el 2020 en 70.128 toneladas (-3,7% respecto al año anterior).

Italia había sido hasta el año 2014 el principal proveedor del mercado del aceite de oliva japonés. Sin embargo, en ese año la situación cambia y España pasa a ocupar la posición de liderazgo o con una cuota de mercado del 48,5% frente al 43,3% de Italia en términos de volumen. El año siguiente, 2015, España aumentará la distancia con su principal competidor, Italia, en términos de volumen, y superará también a éste en términos de valor y desde este momento, nuestro país pasa a ocupar la primera posición en el mercado del aceite de oliva japonés, tanto en términos de volumen como en términos de valor.

España finalizó el ejercicio 2020 con un total de 45.548 toneladas y 16.715 millones de yenes exportados a Japón (137,2 millones de euros), frente a las 20.555 toneladas y 11.285 millones de yenes (92,6 millones de euros) alcanzados por los aceites italianos. Esto supone un porcentaje del 64,9% del volumen total y del 55,9% en términos de valor, frente al 29,3 % y 37,8% de Italia, respectivamente.

"El aceite de oliva se está comenzando a utilizar en la preparación de platos típicos de la cocina japonesa como la tempura"

Consumo

Respecto al consumo del aceite de oliva, el 80% de los japoneses consume aceite de oliva, mientras que un 90% conoce su existencia. El consumo en los hogares es muy importante y causa por la cual las cifras de importaciones japonesas de este producto están aumentando. Según este estudio, el 9% de los consumidores solo consume aceite de oliva cuando come fuera de casa. En este caso, la frecuencia en el consumo es baja (un 75% de este grupo lo hace menos de una vez al mes). Los platos en los que se puede encontrar este producto suelen ser pasta, ensaladas y pan y la razón por la que lo consumen en un 53% de los casos es por el sabor. Además, se considera un producto propio de ocasiones especiales y que suele responder muy bien a las promociones en el establecimiento.

En el caso de los hogares, el consumo se realiza una o dos veces por semana y suele usarse como ingrediente en ensaladas o para la preparación de pasta. Según ICEX, este producto se ve como producto de uso diario, por lo tanto, cuanto más bajo sea su precio, mayor será su consumo. Asimismo, el aceite de oliva se utiliza principalmente para preparar platos típicos de la cocina mediterránea y, sobre todo, platos occidentales cuya base es el pescado cocinado (es decir, excluyendo los platos de tipo sushi o sashimi).

ICEX destaca que el aceite de oliva se está comenzando a utilizar en la preparación de platos típicos de la cocina japonesa como la tempura, sin embargo, su uso en recetas japonesas sigue siendo minoritario: un 25% de los japoneses identifican su preparación de solo recetas japonesas como uno de los motivos por los que no consumen aceite de oliva.

En definitiva, pese a que el aceite de oliva todavía es considerado en Japón como un ingrediente especial, está ampliando sus hábitos de consumo. La proliferación de restaurantes occidentales, especialmente italianos y españoles, y su diversificación hacía segmentos de poder adquisitivo medio han facilitado la familiarización de la sociedad japonesa, y especialmente las nuevas generaciones, con la dieta europea y mediterránea. El consumidor japonés es proclive al uso de nuevos productos y a las nuevas modas culinarias, especialmente de alimentos extranjeros, por lo que una correcta promoción del aceite en este mercado puede permitir continuar esta tendencia.

La evolución del consumo de aceite de oliva en Japón es especialmente favorable entre japoneses de mediana edad, residentes en Tokio o en grandes ciudades japonesas. Entre las jóvenes japonesas también están teniendo un éxito cada vez mayor los productos para el cuidado de la piel y el cabello en cuya elaboración se utiliza aceite de oliva.

"En el caso de España todavía no existe una imagen país consolidada en el mercado del aceite de oliva"

Percepción del producto español

El principal reto al que se enfrentan actualmente la Administración y las empresas españolas es la creación de una imagen país que relacione España con su figura como primer productor mundial de aceite de oliva y su cultura gastronómica. En contraste con el aceite italiano, donde es común recurrir a colores y motivos nacionales en el etiquetado, en el caso de España todavía no existe una imagen país consolidada en el mercado del aceite de oliva, pese a la buena acogida de este producto en Japón.

A su juicio, la promoción del aceite de oliva realizada en los últimos años en el segmento superior de consumidores ha buscado solventar este hecho. Gracias a ello, se está percibiendo una mejora en el conocimiento de las diferentes variedades del aceite de oliva en general, y del español en particular. Este cambio ha sido especialmente notable en la región de Kanto (Tokio y ciudades colindantes), donde la saturación del mercado ha conducido a los exportadores a diferenciar su producto mediante la exaltación de las peculiaridades locales. No obstante, según ICEX, el conocimiento del aceite español sigue estando muy concentrado en unos pocos segmentos del mercado, siendo necesario ampliar esfuerzos para la promoción del aceite hacia el consumidor medio y el uso del aceite en la dieta tradicional japonesa.

Asimismo, este organismo asegura que conviene hacer un esfuerzo por adaptar los envases a los hábitos de consumo japoneses. Los formatos actualmente más reclamados son los de 200 y 600 ml.