En general, la superficie agrícola utilizada disminuyó un 0,3%, mientras que el número de explotaciones se redujo un 2,1% en el año 2016 respecto a 2013.
En el caso concreto del olivar, pasó de las 2.194.434 hectáreas de superficie agrícola utilizada en 2013 a los 2.275.430 hectáreas en 2016 (+3,7%), según el INE.
Estadística indica, además, que en ese mismo periodo se registró, en general, un aumento del 1,6% de la superficie agrícola utilizada media por explotación, que pasó de 24,67 hectáreas en 2013 a 25,06, en 2016. En el periodo comprendido entre 2013 y 2016, la superficie de tierras labradas aumentó un 1,8% mientras que la de pastos permanentes se redujo un 4,3%.
Por cultivos, los herbáceos y barbechos concentraron el 49,3% del total de la SAU en 2016, mientras que los pastos permanentes supusieron el 32,8% del total . Los frutales, olivar, viñedo y otros leñosos representaron el 17,9% restante.